Quién ha pasado por la muerte de un hijo no encuentra consuelo, no entiende por qué ha pasado, todo le parece injusto y quisiera devolver el tiempo para poder cambiar el presente. Permitir que su hijo/a siga en el camino a sus sueños, a los planes que hicieron juntos. Pero la realidad es innegable y para afrontar este proceso, algunas cosas como este artículo, ayudan a que sea más llevadero.

Qué es un duelo

Existe un instrumento para medir el estrés al que se somete una persona. Se conoce como la Escala de Reajuste Social de Holmes y Rahe. Según esta, la muerte de un hijo hace parte de las situaciones más estresantes por las que pasa una persona. Pero… ¿De qué sirven estos datos?

Con lo anterior se da a conocer el duelo por la pérdida de un hijo como una situación muy intensa… desde el estrés, el dolor, la frustración y la impotencia, entre otros sentimientos que pueden surgir. No hay una forma fácil de entender o comparar este duelo con otro.

Emociones asociadas al duelo

La muerte de un hijo representa una situación siempre traumática porque no es natural. Se aleja de todos los paradigmas y las lógicas de la vida, no es fácil aceptarlo y menos superarlo. Algunas de las emociones asociadas a este duelo son anhelo, soledad, ira, culpa, negación, dolor, frustración, rabia, enfado, tristeza, miedo y sensación de vacío.

Estas emociones son naturales y es necesario expresarlas para evitar que nos ahoguen. Se puede fluir con ellas por medio del llanto, el hablar con alguien, el escribir o intentar otra actividad en la que se exprese todo lo que se siente.

Etapas comunes del duelo por la pérdida de un hijo

Aceptar la muerte: Aceptar que no hay vuelta hacia atrás, que no existe un botón para retroceder el tiempo y pensar en todo lo que se pudo haber hecho. Exteriorizar las emociones: Es válido llorar una y otra vez, hablar del hijo que partió para siempre, pronunciar su nombre, darles nombre a las emociones e intentar de varias formas sacar todo lo que se siente. No es fácil, no se hace rápido y requiere paciencia.

Pensar y adaptarse a un nuevo futuro: En este proceso, es recomendable no cambiar de ciudad por huir de esa situación. Antes de tomar decisiones hay que preguntarse si eso es lo mejor que se puede hacer, o no. Si va a generar un bienestar o, por el contrario, es una clase de negación de lo ocurrido.

Posibles consecuencias de la tristeza en un duelo

El duelo cuando fallece un hijo puede tardar años, es un proceso de asimilación de la pérdida muy complejo. En él se pueden presentar algunas consecuencias o casos particulares:

  • Lo más frecuente son problemas de salud, como insomnio, ansiedad, depresión y crisis de angustia.
  • La tristeza durante el duelo también genera pérdida de peso, aumento de peso y mayor riesgo de padecer un ataque cardiaco.
  • Este sentimiento puede conducir a la drogadicción, el alcoholismo o incluso el suicidio.

Métodos para superar el duelo

El amor hacia los hijos es infinito, de manera similar el dolor por la pérdida de un hijo siempre está, pero no siempre va a ser igual de intenso. Hay algunos métodos que ayudan a vivir esta etapa del duelo.

Es bueno hablar de él o ella y decir el nombre. Pedir ayuda a familiares para realizar algunas tareas cuando es difícil focalizar la atención. También sirve tomar tiempo y decidir qué hacer con las pertenencias. Además, resulta muy beneficioso participar en grupos de apoyo o charlar con padres que hayan pasado por lo mismo.

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